¿Por qué se sobrecalientan los rodamientos de los motores y cómo saber si la temperatura es anormal? Conocer las normas sobre la temperatura de los rodamientos es crucial, pero las condiciones del mundo real suelen requerir evaluaciones más matizadas. Este artículo analiza la importancia no sólo de cumplir las normas nacionales, sino también de tener en cuenta los factores ambientales y las circunstancias específicas de cada motor. Aprenda a tomar decisiones informadas sobre las temperaturas de los rodamientos de los motores para evitar fallos y garantizar un funcionamiento fiable.
¿Cómo determinar si la temperatura de un rodamiento de motor es anormal en condiciones reales de trabajo?
Normalmente, la mayoría de los ingenieros de motores emiten juicios según algunas normas nacionales correspondientes. Algunas normas comunes de temperatura de motores son las siguientes:
1. GB3215-82 4.4.1: Durante el funcionamiento de la bomba, el máximo temperatura del rodamiento no debe superar los 80°C.
2. JB/T5294-91 3.2.9.3: El aumento de la temperatura del rodamiento no debe superar la temperatura ambiente en 40°C, la temperatura máxima no debe superar los 80°C.
3. 4.3.3. JB/T6439-92 Cuando la bomba funciona en las condiciones especificadas, la temperatura de la superficie externa del cojinete interno no debe superar en más de 20°C la temperatura del medio transportado, y la temperatura máxima no debe superar los 80°C. La temperatura de la superficie externa del cojinete externo no debe superar los 40°C por encima de la temperatura ambiente. La temperatura máxima no debe superar los 80°C.
4. JB/T7255-94 5.15.3: Temperatura de funcionamiento de los rodamientos. El aumento de la temperatura del rodamiento no debe superar la temperatura ambiente en 35°C, y la temperatura máxima no debe superar los 75°C.
5. JB/T7743-95 7.16.4: El aumento de la temperatura de los cojinetes no debe superar la temperatura ambiente en 40°C, y la temperatura máxima no debe superar los 80°C.
6. JB/T8644-1997 4.14: El aumento de la temperatura de los rodamientos no debe superar la temperatura ambiente en 35°C, y la temperatura máxima no debe superar los 80°C.
Sin embargo, en la práctica de la ingeniería, ¿podemos confiar únicamente en estas normas nacionales para determinar si se ajustan completamente a las condiciones reales?
Por ejemplo, en la práctica nos encontramos a menudo con las siguientes preguntas:
Las normas mencionan 75 ℃ y 80 ℃, ¿cuál debo elegir?
¿Es correcto declarar un problema en cuanto la temperatura de funcionamiento del motor supera la norma? Por ejemplo, si la norma es 80 ℃, y la temperatura de los cojinetes del motor es sistemáticamente de 82 ℃, ¿debemos concluir necesariamente que hay un problema?
He visto muchos artículos que aplican directamente las normas nacionales al pie de la letra. Bastantes perspectivas utilizan una única "línea roja" de temperatura como punto de referencia para determinar si las temperaturas de los rodamientos son anormales. Desde hace muchos años de práctica de la ingeniería, creo que una aplicación tan rígida es inadecuada.
En primer lugar, las normas nacionales incluyen ciertos requisitos medioambientales. Los requisitos reales del entorno de ingeniería difieren de los estipulados por las normas nacionales.
En segundo lugar, las normas nacionales proporcionan directrices para situaciones comunes. La tensión y la disipación térmica del rodamiento varían en función de las circunstancias. Si a esto añadimos los posibles problemas de diseño, instalación y uso de los rodamientos, surgen multitud de complicaciones a la hora de aplicar estas normas.
Por eso, cuando hablo de las temperaturas de los rodamientos, no abordo directamente los criterios de valoración. En su lugar, parto de conceptos básicos sobre las temperaturas de los rodamientos y su distribución. Comprender estos conceptos básicos permite emitir juicios más racionales y prácticos sobre si la temperatura de un rodamiento es anormal o no.
Por lo tanto, en general recomiendo utilizar las normas nacionales para evaluar las temperaturas de los rodamientos del motor, pero es fundamental realizar un juicio integrado teniendo en cuenta la diferencia de temperatura entre el rodamiento y los componentes circundantes, así como la propia distribución de la temperatura del rodamiento. Este enfoque puede ayudar a evitar o explicar los siguientes problemas:
La temperatura del cojinete del motor no ha superado el límite, pero un cambio drástico y repentino de la temperatura provoca la rotura del cojinete.
La temperatura del cojinete del motor no ha superado el límite, pero las altas temperaturas localizadas provocan el quemado del cojinete.
La temperatura del cojinete del motor ha superado el límite, pero el cojinete funciona de forma estable sin problemas.
En un entorno de alta temperatura, la temperatura de los cojinetes del motor supera el límite, lo que activa alarmas frecuentes.
El motor se sobrecalienta gravemente, la temperatura de los cojinetes supera constantemente el límite, y cambiar los cojinetes no ayuda.
Por supuesto, hasta ahora sólo hemos hablado de cómo identificar las anomalías. Las causas de estas anomalías se irán desvelando poco a poco en el futuro.
En resumen, la evaluación de las anomalías en las temperaturas de los rodamientos de los motores no debe ceñirse rígidamente a determinadas normas nacionales. Requiere una comprensión exhaustiva de los conocimientos básicos sobre la temperatura de los rodamientos y emitir juicios basados en las circunstancias del entorno. Al mismo tiempo, es importante no pasar por alto las normas nacionales.